domingo, 11 de octubre de 2009

El barranco


Condujo hasta la entrada a las obras; "prohibido el paso a toda persona ajena". Abrió las verjas y se quitó los tacones. Camino con ellos en la mano. De lado a lado por culpa de unos cuantos chupitos de tequila. Los mismo que hicieron que tardase más tiempo en llegar. Pero llegó. Y allí encontró junto al borde del barranco la colilla del cigarro del día anterior. Dejó de ser ayer, se fumó otro. Sacudió el vestido de la tierra, se puso los zapatos y regresó.Algún día tiraría la colilla por el barranco y dejaría de conservar los restos.

1 comentario:

  1. No quería tirar la colilla por el barranco porque creía que significaba tirar con ella un pedazo de sí misma, una parte de su historia.
    Pero como había reconocido, ya no era ayer.
    Muchos besicos :)

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